Bastia: E-G-G-G
Cuatro días antes de recibir al Barça en el Parque de los Príncipes, no hay motivo para la relajación para el PSG. Esta noche (21.00 horas) disputa la final de la Copa de la Liga contra el Bastia sin rehuir la condición de favorito. Tras haber conquistado en agosto la Supercopa francesa ante el Guingamp, el equipo de Laurent Blanc puede acabar levantando cinco trofeos esta temporada.
Las lesiones, un lastre
El de este sábado ería el segundo a los tres días de meterse en la final de Copa que jugará el 30 de mayo ante el Auxerre. Le quedarían la Ligue 1, de la que es líder con un punto más que el Olympique Lyon, y la Champions, con el Barça como próximo rival y otro de los aspirantes a la triple corona (Liga, Copa y Champions) junto con el Bayern y la Juventus.
“Tenemos un partido importante el miércoles pero todos lo son”, advirtió Blanc, que no podrá disponer de los lesionados David Luiz y Motta y tiene entre algodones a Lucas Moura y Cavani, ausentes el miércoles ante el Saint Etienne en la Copa. Ibrahimovic y Verratti, sancionados en la ida ante el Barça, y Aurier, también castigado para la vuelta, sí estarán hoy en el Stade de France en pos del quinto título del PSG en el torneo. El Bastia recupera al brasileño Brandao tras seis meses suspendido por su cabezazo a Motta.
Duro comunicado del PSG
Tras ser sancionado Ibra con cuatro partidos de Liga por decir “este es un país de mierda”, el PSG emitió un duro comunicado: “El club deplora el ensañamiento del que es víctima su jugador a la vista de su inmensa contribución a la imagen del fútbol francés aquí y por todo el mundo”. Horas después, estalló Ibra en su aplicación móvil Zlatan Unplugged: “Es una farsa ridícula, poco profesional. Una vergüenza para el fútbol. Hubiera sido aún más feliz si hubiera sido suspendido por el resto de la temporada. Así tendría vacaciones más pronto”, ironizó.
